Roderick Strong ha hablado sobre las dificultades que tuvo para entrenar a Marina Shafir.
Roderick Strong, actual Campeón Norteamericano de NXT, ha comentado las dificultades que tuvo para entrenar a su esposa, Marina Shafir, en el mundo del wrestling. Shafir, conocida por su paso por las MMA, solo lleva dos años como luchadora a tiempo completo y se encuentra dentro de las 4 HorseWoman de UFC. En una entrevista para After The Bell, Strong ha llegado a afirmar que en un primer momento intentó evitarlo.
El motivo de esta decisión es que él se considera excesivamente duro consigo mismo y no quería cargarla a ella con ese peso. Igualmente, Strong ha afirmado que la luchadora es exactamente igual que él, lo cual provocaba problemas. Los principales problemas es que él trataba de ser excesivamente ayudante mientras que ella se enfadaba porque las cosas no iban tal y como ella quería.
Finalmente, Shafir consiguió encontrar su forma de luchar y según Strong es realmente creativa. El luchador ha afirmado que Shafir no era una gran fan de la lucha libre lo cual provocó que tuviese que aprenderlo todo mientras que entrenaba. Eso precisamente ha sido realmente de ver para él. Shafir sigue siendo habitual como acompañante de Shayna Baszler y es habitual verla dentro del ring dentro de los combates de los house shows.