En este artículo hablaremos de cómo podría WWE bookear el Road To WrestleMania 37 de Edge. Book it, Vince!
Desde TurnHeelWrestling os traemos la cuarta entrega de ‘Book It, Vince!’, la sección donde hablamos de cómo pensamos que WWE podría enfocar algunas de sus historias actuales, de cómo pudo contar historias del pasado, o de cómo podría desarrollar las nuevas historias que el WWE Universe espera ver en el futuro.
Todo esto lo hacemos tomándonos ciertas libertades (al fin y al cabo, todo esto es pura fantasía) pero siempre dentro de los límites de la realidad, pretendiendo que WWE quiere llenar pabellones (ya no tanto en tiempos de pandemia) y enganchar al WWE Universe al televisor.
Esta vez, nos centraremos en el Road To WrestleMania 37 de Edge. En el momento en que escribimos estas líneas, Edge ha anunciado su participación en el Royal Rumble masculino tras haber pasado cerca de un año apartado de los cuadriláteros por una lesión de tríceps, la cual sufrió en pleno desarrollo de su ferviente rivalidad con Randy Orton. Empezaremos en la noche de Royal Rumble 2021, y poco a poco avanzaremos hasta la celebración del magno evento.
¿Cómo podría plantear WWE el Road To WrestleMania 37 de Edge? Book it, Vince!
Arrivederci, Randy Orton
En primer lugar, es totalmente necesario dejar de lado la rivalidad entre Edge y Randy Orton. Hace un año que el feudo se vio interrumpido por la lesión del canadiense y, si en su momento muchos fans criticaron la longitud excesiva de la historia, a día de hoy todo lo que hubo entre ambos se ha enfriado por completo. Además, Randy Orton se encuentra inmerso en una de las storylines más importantes del momento, y todo parece apuntar a un combate entre ‘The Viper’ y ‘The Fiend’ Bray Wyatt en WrestleMania. Por tanto, diremos adiós a la posibilidad de retomar el feudo entre los antiguos miembros de Rated RKO, y pasaremos página.
Determinación y desesperación personificadas
En su promo en Monday Night Raw, hemos podido ver a un Edge pasional, decidido a arriesgar todo con tal de llegar al main event de WrestleMania y recuperar aquello que perdió casi 10 años debido a su desafortunado y repentino retiro. Como dato curioso, Edge anunció su retiro un 11 de abril, fecha en que se celebrará la segunda noche de WrestleMania 37. Parece que el destino quiere ver a Edge cerrar un círculo, una etapa llena de sacrificios e incertidumbre alejado de la acción, para poder retomar su carrera allí donde la dejó de manera forzosa hace justo una década: como campeón mundial.
Por otro lado, el propio Edge es consciente de que, a sus 47 años y tras el parón de un año por lesión, la posibilidad de cerrar ese círculo se esfuma poco a poco. Por este motivo, y siguiendo la línea de sus promos más recientes, Edge debería volverse un personaje sin miedos, dispuesto a jugársela y lograr llegar a WrestleMania 37 como retador a uno de los títulos mundiales. Deberíamos poder ver a una versión de Edge desesperada, pero también determinada. Un Edge despiadado, casi fuera de sí, capaz de cualquier cosa con tal de conseguir sus objetivos. Una versión madura de la ‘Rated R Superstar’ oportunista que un día fue, pero cuya causa esta vez emociona y genera cierta empatía.
Edge no hará daño a la órbita titular
Es totalmente normal que la idea de ver a Edge retando a un campeón mundial en el ‘Grandest Stage of Them All’ cause cierto rechazo. Los fans de WWE hemos pasado demasiados años viendo como leyendas de la talla de The Rock, Brock Lesnar o Goldberg decidían hacer una visita y acaparar los puestos importantes de la cartelera, como decía el clásico de Western, «por un puñado de dólares», mientras que las superestrellas que se cargaban la empresa a sus espaldas durante el resto del año pasaban injustamente a un segundo plano.
Sin embargo, el caso de Edge es algo distinto. Las leyendas que menciono arriba tuvieron todos los momentos de gloria posibles, y fueron capaces de apartarse del ring cuando considerasen, tras haber conseguido todo lo que querían. Edge se vio obligado a dejar su mayor pasión de la noche a la mañana, debido a una injusta lesión, y ha pasado diez años trabajando duro día tras día para intentar volver, aunque fuese por un tiempo breve. Resulta un caso muy similar al de Daniel Bryan, quien casualmente, poco después de su regreso consiguió hacer de la órbita titular de SmackDown algo memorable durante mucho tiempo.
Por otro lado, seamos honestos: a Drew McIntyre y Roman Reigns no les quedan rivales suficientemente creíbles de cara al magno evento. Enfrentar a Edge con uno de los dos haría del encuentro un ‘dream match’ y atraería mucho más que el uso de nombres como AJ Styles, Shinsuke Nakamura o Kevin Owens. Me veo también obligado a afirmar que la expresividad y la intensidad que Edge es capaz de poner en cada historia que cuenta, son de una calidad incomparable.
Si Edge ganase el título en WrestleMania, podríamos tener uno de los ‘WrestleMania moments’ más emotivos de los últimos años. El reinado no tendría por qué ser necesariamente largo, y podría terminar estableciendo nuevas superestrellas top. En caso contrario, Edge es una leyenda consagrada y no saldría perdiendo en absoluto: de hecho, serviría como un «passing of the torch» a Reigns o McIntyre.
Primer paso: Royal Rumble
Nos encontramos en Royal Rumble 2021. Roman Reigns y Drew McIntyre han logrado retener sus respectivos campeonatos en el show, y llegamos al main event de la noche: el Royal Rumble masculino. En los momentos finales del combate, queda el siguiente Final Four:
- Cesaro: ha sido uno de los primeros participantes y es el Iron Man del combate, tras haber pasado más de 45 minutos sobre el ring.
- Daniel Bryan: ya tuvo un pequeño pique con Cesaro en SmackDown pero no llegaron a enfrentarse. Este será el escenario en el que finalmente se verán las caras.
- Edge: ha entrado al ring entre las posiciones 15-20, y aunque se encuentra exhausto muestra una gran intensidad, movido por su fijación.
- Keith Lee: durante el combate ha igualado el récord de eliminaciones en un solo Rumble, y es el luchador con más posibilidades de ganar.
Keith Lee intercambia golpes con Daniel Bryan, mientras que Edge se encara con Cesaro. Edge intenta echar a Cesaro del ring con un Clothesline en carrera, pero Cesaro tira de la tercera cuerda hacia abajo y Edge pasa sobre el encordado para caer de pie en el borde del ring. Edge golpea a Cesaro para quitárselo de encima, pero justo después Keith Lee esquiva el Running Knee de Daniel Bryan, que golpea a Edge y lo elimina.
Bryan se queda en shock tras haber eliminado a alguien con una historia reciente tan similar a la suya, y cuyos sueños acaba de romper, tal como Bray Wyatt hizo con él en Royal Rumble 2015. Por su parte, Edge no lo puede creer: mira con incredulidad a Daniel Bryan y termina marchándose lentamente, con los ojos llorosos, mientras la cámara lo sigue. Finalmente, Cesaro elimina a Keith Lee con un Body Slam sobre las cuerdas y, tras unos minutos de contienda, Daniel Bryan termina eliminando al suizo para ganar su primer Royal Rumble.
Segundo paso: una nueva oportunidad
Tras ganar el Royal Rumble, Daniel Bryan decide retar a Roman Reigns por el Campeonato Universal, para vengarse por el ataque de Jey Uso meses atrás y acabar con el abuso de poder del ‘Head of the Table’. Mientras tanto en Raw, el retador al Campeonato de WWE se decidirá dentro de la Elimination Chamber. Los participantes se deberán clasificar en una serie de combates. En su combate clasificatorio, Edge se enfrenta a Ricochet. Al final del combate, el árbitro se lleva un golpe fortuito y Edge aprovecha para aplicar un fuerte golpe bajo a Ricochet. Edge empieza a mostrarse casi colérico, se marcha a la esquina y conecta una agresiva Spear para llevarse la victoria.
Llegamos a Elimination Chamber, y los participantes son: Edge, Keith Lee, Sheamus, AJ Styles, Ali y Bobby Lashley. Edge y Keith Lee empiezan el combate y se vuelven a ver las caras tras el cruce en Royal Rumble. Edge lucha de manera muy agresiva e intensa, y logra aguantar la mayor parte del combate, eliminando a AJ Styles, Ali y Sheamus. Sin embargo, poco después Keith Lee aplica una fuerte Spirit Bomb a Edge, dejándolo (en kayfabe, por supuesto) dolorido del cuello y totalmente mareado por el latigazo cervical. A pesar de los intentos de Edge por seguir luchando y tras agredir a varios oficiales, estos terminan obligando a Edge a abandonar el combate. Finalmente, Keith Lee termina llevándose la victoria tras eliminar a Bobby Lashley.
Tercer paso: todo o nada
En el Raw posterior a Elimination Chamber, WWE informa que Edge tuvo suerte y se encuentra en estado favorable. Durante una promo de Keith Lee al final del show, Edge aparece por sorpresa y lo ataca por la espalda. Vemos a Edge totalmente fuera de sí, atacando a Keith Lee duramente y aplicando diversas Spears, hasta que lo derriba por completo. Edge se desespera, se muestra indeciso pero conducido por la ira y la frustración, y se marcha a ringside para agarrar dos sillas metálicas. Se dispone a aplicar un Con-Chair-To sobre Keith Lee, pero en el último momento interrumpe Adam Pearce desde la rampa. Sin embargo, antes de que Pearce llegue a decir nada, Edge aplica el sillazo y deja inconsciente a Keith Lee.
A la semana siguiente, Adam Pearce explica que, tras el incidente de Elimination Chamber, tenía pensado ofrecer a Edge la oportunidad de enfrentarse a Keith Lee y convertir al ganador en aspirante número uno. Pero sin embargo, debido a las acciones despiadadas de Edge, se ve obligado a retirar la oferta. Edge interrumpe a Adam Pearce y le dice que, a pesar de todos los logros que ha obtenido, su carrera no habrá servido de nada si no logra esa oportunidad titular, ese main event en WrestleMania, y la oportunidad de recuperar lo que una vez se vio obligado a abandonar. Sin embargo, Pearce le responde que debe acatar las consecuencias de su ataque de ira. Al borde de la desesperación, Edge le hace una propuesta a Adam Pearce: le dice que no tiene nada que perder, que sin esa oportunidad titular, sentiría que esos diez años de trabajo duro y sufrimiento habrán sido un fracaso, y que está dispuesto a poner su carrera en juego si es necesario. Finalmente, Adam Pearce acepta la oferta. Edge se enfrentará la próxima semana a Keith Lee para definir al aspirante número uno, con la carrera del canadiense en juego. Si vence, se enfrentará a Drew McIntyre en WrestleMania, en un Title vs. Career match.
En el siguiente episodio de Raw, Keith Lee y Edge tienen un duro combate y ambos luchadores dan lo mejor de sí mismos. En los momentos finales, Edge derriba a Keith Lee y el árbitro cae noqueado. Edge saca dos sillas metálicas con la intención de ganar el combate de manera ilegal como hizo con Ricochet. Tras unos momentos de indecisión y desesperación, el canadiense decide aplicar un Con-Chair-To, pero justo cuando Edge se dispone a golpear, el árbitro logra reponerse a tiempo y le arrebata la silla. Edge discute con el árbitro, Keith Lee se levanta, voltea a Edge y lo levanta para la Spirit Bomb. Edge se zafa y cae a espaldas de Keith Lee, se impulsa en las cuerdas y conecta un Spear para llevarse la victoria.
En el último Raw antes de WrestleMania, Edge y Drew McIntyre intercambian palabras. Drew McIntyre afirma que, aunque siempre ha admirado a la ‘Rated R Superstar’, debe cimentar su legado como campeón, aunque eso implique retirar definitivamente a Edge. Por su parte, Edge asegura al escocés que no ha llegado hasta este punto para terminar cayendo y que, en WrestleMania, cuando se trate de salir de allí con todo o nada, será capaz de cualquier cosa con tal de conseguir lo que es suyo y volver a la cima de la montaña.
Cuarto paso: desenlace
Llegados a este punto, nos encontramos con un Drew McIntyre vs. Edge, Claymore vs. Spear, título vs. carrera, en el main event de la segunda noche de WrestleMania 37. Se trata de un verdadero combate de ensueño para poner punto y final al primer gran show de WWE celebrado con público en más de un año.
Debería tratarse de un combate muy igualado, lleno de falsos finales y nearfalls, en el que McIntyre aguante diversas Spears por su superioridad física, y en el que Edge soporte múltiples Claymores por todo lo que está en juego y lo que el combate significa para él. En los momentos finales, Edge logra aplicar un Spear por sorpresa, pero McIntyre se zafa del conteo en el último instante. Edge se desespera, sabe que con un movimiento más se llevará el combate. Marcha a la esquina y prepara un nuevo Spear, pero McIntyre termina recibiéndolo con una última Claymore que le otorga una victoria muy apurada pero justa.
Tras terminar el combate, ambos luchadores levantan el brazo del otro en señal de respeto. Drew McIntyre celebra entre fuegos artificiales y se marcha, dejando que Edge tenga su momento de despedida con el público asistente para finalizar el show.
Quinto paso: el día después
En el Raw post WrestleMania, Edge debería recibir una despedida oficial rodeado del roster, en la que quizá podría compartir un pequeño segmento con Christian, ‘Five second pose’ incluida.
En cuanto al reinado de Drew McIntyre, contaríamos con Keith Lee como primer aspirante de cara a Money in the Bank. Tras el combate que dieron recientemente en Raw, la empresa estaría dispuesta a construir una rivalidad entre ambos. A partir de este punto, Keith Lee podría ser quien destrone a Drew McIntyre; sin embargo, creo que el reinado del escocés podría terminar de manera sublime si el encargado de arrebatarle el campeonato fuese el próximo Mr. Money in the Bank. Sería un buen modo de proteger a McIntyre y Lee, al mismo tiempo que por primera vez en varios años se trata con seriedad al poseedor del maletín.
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Listado de ‘Book It, Vince!’ anteriores:
-Vol. I: el retorno de Bray Wyatt (junio 2019)
-Vol. II: el retorno de Sasha Banks (agosto 2019)
-Vol. III: WWE Draft 2019 (octubre 2019)
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