Se revela por qué la cláusula de no competencia de Samantha Irvin tras abandonar WWE es de dos años.
Hace poco más de un año, Samantha Irvin decidió abandonar WWE de forma repentina, después de dejar claro que no quería continuar desempeñando su rol como anunciadora, algo que la empresa ya sabía desde hacía un tiempo. Desde entonces, no la hemos visto en ninguna otra compañía de lucha libre, y recientemente ha revelado que tiene una cláusula de no competencia de dos años tras su salida de WWE, algo que sorprendió a muchos fans por la inusual duración de dicha cláusula.
Sean Ross Sapp, durante un Preguntas y Respuestas en Fightful Select, explicó que el motivo por el que Samantha Irvin cuenta con una cláusula de no competencia tan larga se debe a que, cuando aún estaba bajo contrato, ya había expresado su deseo de dejar el puesto. Sin embargo, WWE logró convencerla para renovar ofreciéndole un aumento salarial considerable y añadiendo como condición una cláusula de no competencia de dos años.
Sí, firmó un nuevo contrato, creo que a comienzos de 2024. Ella les había dicho que no quería seguir siendo anunciadora de ring, pero le ofrecieron un aumento de sueldo bastante importante.
Claro, con ese aumento de sueldo, WWE quería recuperar la inversión, ya sabes cómo funciona. Por eso empezaron a enfocar tanto la cámara en su cara y todo eso. Y, claro, al poner tanto la cámara en su cara, eso generó mucho acoso y críticas, pero lo hacían para crear momentos virales.
Quitaron a bastante personal de anuncios de ring de los eventos en directo y la pusieron a ella a hacer más trabajo. Y realmente ella no quería seguir haciendo de anunciadora. Por lo que tengo entendido, le halagó mucho la oferta, pero cuando la aceptó, también firmó una cláusula de no competencia bastante dura. Esa cláusula ya está a mitad de camino.
Duraba dos años, y ahora lleva cumplido uno. En aquel momento, no creo que tuviera intención alguna de irse a otra empresa; simplemente no quería seguir anunciando combates ni nada por el estilo. Pero quizá en octubre de 2026 estemos hablando de que está acompañando a Ricochet como mánager o algo así.
Además, WWE dio a entender públicamente que ella se marchó para centrarse en la música, pero no fue exactamente así. Ella siempre se había dedicado a la música.
A Samantha Irvin aún le queda un año por cumplir antes de que dicha cláusula expire. Una vez finalice, veremos si decide incorporarse a otra empresa de wrestling. Naturalmente, la primera opción que muchos mencionan es AEW, donde actualmente trabaja su marido, Ricochet, con quien Irvin ha mostrado interés en volver a colaborar en pantalla, como ya hicieron brevemente en WWE durante la rivalidad de Ricochet con Logan Paul.
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