Los combates cinematográficos emergen.
La WWE y la industria del cine, han estado ligadas en numerosas ocasiones directa o indirectamente, ya sea por largometrajes producidos por la propia compañía (lo más reciente serían la película ‘Main Event’ y la sitcom ‘The Big Show Show’, ambas emitidas en Netflix) o por superestrellas de la propia empresa que han cambiado el cuadrilátero por los platós (The Rock o John Cena, por ejemplo). Y a coalición de esto, en este artículo, vamos a hablar sobre el tipo de combate de los que todo el mundo habla actualmente: los combates cinematográficos.
Este ‘género’ dentro del wrestling ha sido noticia especialmente a raíz de Wrestlemania donde WWE se vio obligada a celebrar su magno evento en unas circunstancias extraordinarias. Para paliar la ausencia de público y para tratar de ofrecer algo diferente al público, la empresa de Vince McMahon optó por realizar dos de sus luchas como si de dos cortometrajes se trataran.
Otro punto a favor de WWE en este caso, fue la elección de los combates, tanto el Undertakes vs AJ Styles como el John Cena vs ‘The Fiend’ Bray Wyatt, eran dos luchas muy atrayentes de cara al público y que iban a contar con un gran seguimiento.
Y lo cierto es que, cada una a su estilo, no decepcionaron en absoluto. El primer combate que mencionaba, fue capaz de mostrarnos a un Undertaker dominante y con la presencia que veníamos echando en falta últimamente. La labor de AJ Styles también fue digna de mención, ‘The Phenomenal One’ demostró ser capaz de adaptarse a cualquier escenario y de tener un control sobre su personaje a la altura de pocos.
La ubicación, el buen manejo de las luces, el sonido ambiente (y ese tema de entrada de Undertaker) y por supuesto la dirección del mismo. Podría tratarse perfectamente de una pieza audiovisual de cualquier película de acción Hollywood.
Este tipo de combates cinematográficos, también pueden ser de ayuda para alargar la carrera de determinados luchadores. Entre ellos, evidentemente cabe mencionar a The Undertaker, quien sobre el ring denotaba un desgaste evidente y comprensible y sin embargo, en el Boneyard Match, mostró una imagen totalmente diferente. Con este género, un The Undertaker vs Sting ya no parece tan imposible.
Por otro lado está el ‘Firely Fun House Match’ un combate que pienso que solo hay dos opciones: amarlo u odiarlo. Me confienso en que soy del primer grupo. Sí, no es un combate al uso ni nada que mínimamente se le pueda parecer, el Boneyard Match, dentro de sus particularidades, presentaba secuencias más cercanas a las de un combate al uso.
Dicho lo cual, la pieza realizada entre ambos, fue un repaso bizarro a la carrera de John Cena ingeniado y conducido de maravilla por Wyatt y con una predisposición de Cena muy a tener en cuenta. Con el paso del tiempo, opino que podremos verlo como un fuerte impulso del personaje de ‘The Fiend’ y como la primera de muchas Firely Fun House Match.
Una semana después, esta vez en NXT, pudimos volver a disfrutar de este tipo de lucha, con un Johnny Gargano vs Tommaso Ciampa en el que nos encontramos de nuevo con un combate cinematográfico. La ejecución y el resultado del mismo, fueron idóneos en mi opinión. Sin público, la decisión de realizar una lucha así fue perfecta, amargura, tensión, rabia, historia… Un combate que te removía algo por dentro.
Si comparamos los 3 combates cinematográficos que hemos tenido recientemente, podemos observar que no tienen nada que ver entre sí, todos tienen una historia y una ejecución totalmente diferente. Con esto recalco de nuevo que el abanico de opciones que encontramos en este género es gigantesco, aprovecharlo bien o mal, depende de ellos mismos.
Y sí, evidentemente, WWE no es la pionera en lo que a combates cinematográficos se refiere, los hemos visto (aunque en contadas ocasiones) en otras empresas de wrestling. Probablemente, a todos se nos viene a la cabeza Matt Hardy, gran amante de este formato y que nos ha dejado piezas para el recuerdo. Una de ellas, precisamente en WWE frente a Bray Wyatt y no tardaremos en ver alguna pieza de este tipo en su nueva andadura en AEW
Otro punto a favor de estas luchas, es que el género cinematográfico abre las puertas a infinidad de formas de ver, hacer y transmitir un combate. Si tenemos en cuenta que el momento actual imposibilita la presencia de público en los shows (cuyas reacciones y participación activa resulta esencial en esta industria), este tipo de combates ofrecen la posibilidad de camuflar esa frialdad y soledad que transmite ver los aledaños del ring vacíos y enganchar al público a la pantalla.
¿Y cuándo podríamos ver otra pieza similar? Pues es muy probable que en Money in the Bank volvamos a ver este tipo de combate. El formato novedoso que va a presentar los ladder match por lo maletines (con esa escalada de las oficinas de la compañía), abre la posibilidad a que, si bien no todo el combate, parte del mismo podría ser mostrado a través de cinemáticas que culminen con un directo mostrando la obtención del maletín.
Sea como sea, parece que la WWE está dando sus primeros pasos en un género que, al menos durante un periodo de tiempo, parece que va a ser cada vez más recurrente. La duda está en ver qué pasará o cómo se gestionará este tipo de combates cinematográficos una vez todo haya vuelto a la normalidad. Aún tendremos que esperar un tiempo para conocer la respuesta, así que de momento: ¡Luces, cámaras y acción!
Recuerda consultar TurnHeelWrestling para estar al tanto de las últimas noticias sobre WWE, AEW y demás compañías de Pro Wrestling. Además, puedes seguirnos en nuestras redes sociales para no perderte ninguna de las novedades: Twitter, Facebook, Discord, YouTube, Twitch e Instagram.