Analizamos lo mejor y lo peor de Survivor Series 2019.
Este pasado domingo se llevó a cabo desde Chicago una nueva edición de Survivor Series. Y en esta ocasión volvemos con nuestra sección de ‘Lo mejor y lo peor’ para analizar lo más nos ha gustado de Survivor Series 2019 y lo que menos.
El evento de WWE contó con la presencia de NXT por primera vez en la historia y la mayoría de combates eran inéditos, lo cual generó unas expectativas bastantes grandes para el show.
NXT
Está claro, sin duda lo mejor del show fue el añadido de NXT. Y esto es indiscutible. Fue increíble ver a las superestrellas en »desarrollo» encajar con el público del main roster y sobretodo ver como lo de »desarrollo’ es algo que ya les queda pequeño. Ejemplo claros son Rhea Ripley, Pete Dunne o el propio Keith Lee que consiguieron meterse al público en el bolsillo con muchísima facilidad y sin duda si WWE (y Vince McMahon) le dan la oportunidad, estos chicos serán grandes figuras en el futuro cercano de la empresa.
NXT tiene un futuro brillante por delante, es una marca que se siente fresca, con un público muy volcado con ellos y más importante aún, demostrando que son el presente. Eso sí, habrá que ver como trata WWE a partir de ahora a la marca amarilla. Creo que ha quedado claro que actualmente es la marca que mejor está haciendo su trabajo. Y eso que cada miércoles tienen la dura tarea de verse las caras con AEW.
Dominick y Mysterio
Qué cerca nos quedamos de uno de los momentos del año. Seamos justos, ¿cuantos de aquí deseaban ver a Mysterio derrotar a Lesnar después de ese 619 entre padre e hijo? Estoy seguro que todos o la mayoría.
El combate tuvo un buen ritmo, algo corto, pero bueno, teniendo en cuenta que estaba Lesnar en el, es algo habitual. Eso no quita que durante un segundo nos tuvo en vilo cuando la cuenta casi llega a tres.
Hubiese sido un gran momento si Mysterio hubiese ganado el Campeonato de WWE una vez más, para que todos esos fanáticos nostálgicos hubiésemos podido disfrutarlo por última vez. Una lastima y una oportunidad perdida para una gran despedida. Pero esto no quita que fue de lo mejor de la noche. Eso sí, no se noto mucho que fuese un No Holds Barred.
Daniel Bryan YES! y casi
Por un momento mientras miraba Survivor Series, me sentí como si estuviesemos nuevamente en 2014 y el YES! Movement estuviese en todo su esplendor. Sin duda Bryan es una de las superestrellas que mejor combates da en WWE, pero esto no sorprende a nadie. Pero lo que sí sorprendió y a más de a uno fue que ‘The Fiend’ se viese por primera vez algo tocado. Incluso me atrevería a decir que Daniel logró causar más daño sobre Wyatt que el mismísimo Seth Rollins.
El bookeo del combate fue bueno y Bryan no sale perjudicado en absoluto de el. Pero tocará esperar a ver que pasa ahora con ambos, ya que ‘The Fiend’ pese a ver algo más dolido que anteriormente, sigue pareciendo invencible. Pero definitivamente esto merece estar entre lo mejor de la noche.
Pasemos a lo negativo de la noche, que no es poco.
WarGames
Ojo, no venimos a hablar de WarGames ni mucho menos. Solo que la presencia de WarGames la noche anterior al show produjo algo de saturación en los fanáticos y algunos bookeos y decisiones se vieron realmente mal.
Por ejemplo, no tenía mucho sentido tener a Io Shirai enfrentándose a Rhea Ripley la noche anterior en WarGames y la noche siguiente ayudándole a ganar. Un ejemplo de muchos, pero como hemos dicho, todo esto se produce por la cercanía entre ambos shows.
Tampoco creo que repetir la misma fórmula que la noche anterior haya sido un acierto. Nuevamente Ripley se vio en desventaja desde el comienzo del combate, exactamente lo mismo que ocurrió durante la noche del sábado.
Shayna, Lynch y Bayley
Sin duda alguna el peor combate de la noche, o por lo menos un combate del que esperábamos más. El bookeo del mismo no fue el más acertado y WWE no se dio cuenta de esto hasta el mismo final del evento. Pero no solo fue el combate, sino que lo ocurrido después fue aún peor.
Veamos, WWE decide darle la victoria a Shayna Baszler, lo cual es genial si quieres que NXT realmente se vea fuerte. Pero era totalmente innecesario que Becky Lynch cerrase el show celebrando, como si hubiese ganado el combate ella.
Nuevamente la insistencia de WWE por dejar bien parado siempre a sus superestrellas tops destroza un momento perfecto para que NXT cierre el show por todo lo alto y dejando claro cual es la marca que ha dominado durante toda la noche. ¿De qué sirvió que Baszler ganase?
Oportunidades desaprovechadas Made In WWE
Si algo hace mal WWE es tener oportunidades de oro delante de sus ojos y desaprovecharlas. Al igual que el punto anterior donde por querer dejar bien parada a Becky Lynch se desaprovechó la oportunidad de dejar a NXT por todo lo alto, esta fue la tónica de todo el show.
Se desaprovechó la oportunidad de que NXT cierre el show, se desaprovechó la oportunidad de crear un grandísimo momento con Mysterio, y lo que más me dolió fue la oportunidad de dejar a Keith Lee prendiendo fuego el estadio. Pero nuevamente WWE decidió que el ganador debía de ser Roman Reigns, al cual la victoria ni le viene ni le va.
Simplemente imaginad el estadio si Keith Lee lograba derrotar a Roman luego de esa Spirit Bomb. Simplemente increible. Una lastima que cada vez que WWE tiene la oportunidad de hacer algo grande y distinto decida tirar por el camino predecible y habitual.
¡Gracias por leer lo mejor y lo peor de Survivor Series 2019, nos leemos el mes que viene en TLC!